Recamp
3 ejemplos de miles de curaciones en México

Esta campaña

Johan y Brenda Toet evangelizaron en México el fin de semana pasado. Como de costumbre, Dios confirmó Su Palabra con milagros y señales. Miles de personas, en barrios marginales, cárceles y en la campaña al aire libre pudieron recibir sanidad y aceptar a Jesús como su Señor y Salvador.

La organización en torno a la evangelización
Johan y Brenda, con la ayuda de muchos, difundieron el Evangelio en Sudamérica, principalmente a través de campañas al aire libre. Pero antes de que una sola campaña pueda llevarse a cabo, se necesita mucha organización. Lo mismo ocurre en México. Antes, Johan, Brenda y su equipo llevaban meses organizándose. Hay que ponerse en contacto con las iglesias y organizaciones locales, fijar fechas, construir un escenario, organizar los premios a repartir -como motos, televisores, frigoríficos, tabletas y teléfonos- y la publicidad. Y esto es sólo una pequeña muestra de todo el trabajo.

3 acontecimientos especiales
Pero una vez que todo está resuelto, se puede empezar a recoger la cosecha. En México, se planificó una campaña al aire libre, una visita a una de las cárceles más grandes y un evento para mujeres. Llenos de expectación, Johan y Brenda se adentran en todos los eventos y no sin razón. En todas partes, Dios está claramente presente y sana a la gente en gran número.

Curaciones durante la campaña al aire libre
La campaña al aire libre está abierta a todo el mundo. Para atraer a la gente, se reparten artículos gratuitos. Con el premio en la mano, los oyentes escuchan el Evangelio. Se les da la oportunidad de aceptar a Jesús y recibir la curación.

Un ejemplo es una mujer sordomuda. Acompañada por su madre, se acerca a Johan. Aunque nunca antes había ido a la iglesia, quiere oración y sanación. Cuando Johan ora por ella, espontáneamente empieza a hablar en lenguas y rompe a llorar. Su madre se queda boquiabierta al oír de la boca de su hija sonidos que nunca había oído antes. Se miran y empiezan a saltar de alegría. ¡Dios es tan bueno!

Entonces se acerca un tipo grande. Uno de esos que te encuentras en el gimnasio, sólo que eso no se aplica a él. De hecho, hace dos años tuvo un accidente que le dañó la rodilla. Tras varias operaciones, seguía sin poder doblar la rodilla ni ir por la vida sin fuertes dolores. Pero segundos después de la imposición de manos, su rodilla vuelve a ser completamente flexible. No se lo puede creer: completamente sin dolor y con un 100% de libertad de movimiento.

Curación de una niña cubana
Las curaciones no se detienen ahí. Brenda se desplaza a una gran iglesia bautista donde se ha organizado un evento para mujeres con su visita como eje central. En la iglesia, situada en medio de la barriada, Brenda da testimonio de Dios y comparte su historia. Una mujer tras otra se conmueven. Los daños causados por el adulterio y las relaciones con diferentes hombres son sanados en el nombre de Jesús.

De todo el trabajo que Dios hace entre las mujeres, hay un momento que se ha quedado especialmente grabado en la memoria de Brenda. Mientras se dirigía al coche, lista para salir, una chica se le acercó. Había estado esperando. Como muchas otras mujeres que acababan de escuchar a Brenda, es de Cuba y ha huido a México. Desde hace tres años padece una bacteria en el cuerpo que le duele mucho. Brenda reza por ella muy brevemente, pero inmediatamente la chica grita: “¡Eh, se ha ido! Se acerca a un pequeño muro, se sienta en él y se contonea un poco. Resulta que llevaba dos años sin poder sentarse con normalidad debido a las bacterias que tenía sobre todo en las nalgas y la parte superior de las piernas. Y ahora no tenía ningún problema.

Dios confirma Su Palabra
Marcos 16:20 dice: “Iban por todas partes y predicaban el Evangelio, y el Señor cooperaba y confirmaba la Palabra con las señales que la seguían”. Esto es lo que Johan y Brenda ven y experimentan continuamente. La gente viene, escucha la Palabra por primera vez y sin ninguna duda la cree. No hay religión, legalismo o creencias. No piensan: No he orado lo suficiente, no he hecho lo suficiente, no he luchado lo suficiente, no he ayunado lo suficiente. Todavia tengo pecado en mi vida y por eso mi sanacion todavia no ha llegado. No, estas personas reciben la sanidad porque Jesús pagó por sus enfermedades y debilidades. Es una herencia para un hijo de Dios y pueden caminar en ella. Estas personas simplemente creen lo que se ha dicho y lo aceptan. Ese es el terreno en el que Dios puede trabajar. Amen.

Próximas
campañas